"Ustedes se salvarán solo si regresan a mí y descansan en mí. En la tranquilidad y en la confianza está su fortaleza;" Isaias 30:15

Leer este versículo y encontrarme con esa verdad, me dejo sorprendida y asombrada del conocimiento de Dios y sus caminos para nosotros.

Me encontraba corriendo en la vida y preocupada por lograr las cosas, por ser la mejor cristiana, por ser la mejor trabajadora, por ser responsable, por que los demás pensaran lo mejor de mi, por corresponder de la mejor manera al llamado de Dios en mi vida y aparte,  lidiar cada día con los asuntos y problemas que trae la misma existencia. ¿Descansar?, eso no era para mi, la rutina me absorbía y las muchas actividades me atrapaban, el día no alcanzaba para todo lo que tenia que hacer. Mi mente pensaba en mil cosas a la vez y a mi alma ansiosa se le dificultaba encontrar calma. El solo hecho de pensar que mi salvación proviene de estar tranquila y descansar, me sacudió, pues exigía un nuevo nivel de confianza hacia Dios. Dejar de hacer y que el haga ?, tan solo pensar en como hacerlo, irónicamente me ponía mas ansiosa pues aun quería controlar la forma en como debía descansar y soltar todo en Dios.  

Soy colombiana y me mude hace poco a Estados Unidos, pues me case con el hombre mas maravilloso de la tierra y comencé una nueva vida en este hermoso país. Lo primero que Dios me dice al llegar aquí es DESCANSA quédate quieta y CONOCEME. Yo quería volver a mi rutina de hacer, hacer y hacer, de salvar al mundo, de estudiar y aprender, de subir y bajar y de estar ocupada todo el tiempo, eso me hacia pensar que estaba haciendo lo correcto. Pero Dios quería que aprendiera el poder que tiene el descanso.

Hay un tiempo para todo y esta bien ser proactivos y emprender, aun la rutina es una bendición, pero hay un tiempo para descansar y es allí donde Dios se manifiesta. Es en el descanso donde la mente se aquieta, el corazón se transforma en aguas tranquilas, se calla el ruido y la voz de Dios se hace mas fuerte.

Recorde algo que me sucedió una vez adorando con un grupo de niños, había un pequeñito que se durmió en mis brazos en medio de la adoración, yo iba a despertarlo pues estábamos adorando y era un momento importante, pero Dios me dijo: No lo despiertes, el también me esta adorando y así como esta en tus brazos descansando quiero que tu vengas a los míos Y ME ADORES CON TU DESCANSO.

Entendí entonces, que el descanso debe ser emocional, físico y espiritual. Tal vez mientras lees esto te estas preguntando como hacerlo. No se trata solo de acostarte y dormir, es mas muchas veces esa no es la forma en que Dios quiere que descanses. Tu Espíritu debe descansar en la confianza y la fe, en vencer batallas con tu adoración y no con tu preocupación, en tener comunión permanente con el Espíritu Santo y en usar las herramientas que como hija de Dios tienes. Tu Alma descansa cuando alimentas tu mente con verdad, pensar lo verdadero y no las mentiras, pensar lo mejor de ti de Dios y de los otros. Necesitas quedarte quieta y pensar en lo que piensas y pedirle a Dios que le de descanso a tu mente para que puedas sentir paz en lugar de ansiedad, amor en lugar de amargura y felicidad en lugar de tristeza. 

Eres suya, le perteneces a tu amado y solo el sabe como llevarte a la bendición del descanso, aun mientras eres esposa, mamá, mientras trabajas y mientras subes y bajas, tu alma será un rio tranquilo por que El príncipe de paz habita en ti. DECIDE HOY AMARLO Y ADORARLO CON TU DESCANSO.